Caripe,...
más cerca de tí.
Creada por Luis Carlos Buonaffina
Dirección
Venezuela
Sorprendida y agradecida de conocer un nuevo atajo, el mismo conecta el sector de El Copey con el poblado de Cocollar. Les cuento que este recorrido es bastante corto en distancia pero lo majestuoso del paisaje implica hacer varias paradas para contemplar y disfrutar de una naturaleza generosa en belleza. Iniciamos el recorrido tomando el atajo de la papa descrito anteriormente.
Les digo que siempre es divertido tomarlo su paso por el río no pierde la emoción ni la adrenalina, es una forma rápida para ir desde la avenida libertador hasta El Copey , después del paso del río estas inmediatamente en el sector. Estando en la vía principal caminamos hasta la casa de nuestra guía que en esta oportunidad fue la amiga Vanessa Fernández, ella vive en el sector.
Para encontrar el atajo entramos en la propiedad que se encuentra al lado de la Escuela Primaria, allí los dueños anteriores construyeron en cemento 220 escalones con sus descansos que conducen hasta el río Mahomo, hay que tener cuidado puesto que los escalones están cubiertos de hojas y humedad si nos descuidamos podemos resbalar y caer unos cuantos peldaños más abajo y hacernos daño.
Desde la casa antes de descender hay una panorámica del pueblo que no olvidaras. Me permito contarles que esa casa la construimos mi esposo y yo hace veinte años, fué nuestra primera casa aunque nunca vivimos en ella, muchas tardes fuimos hasta allá para bajar al río por piedras para hacer las jardineras, en verdad que la vista hacía el pueblo desde allí es inolvidable, además del olor a pino, las caricias del viento, la iluminación, el sonido del río que en el período de lluvia es más sonoro, todos estos elementos hacen del lugar un verdadero espectáculo, ahora la camineria le agrega exclusividad.
Al finalizar los escalones hay un portón y una cerca ciclón que me imagino que son los caminantes quiénes la tienen bajita de tanto pasar. Al cruzarla te encuentras el río Mahomo, hay que pasar con mucho cuidado pisando las piedras si no te quieres mojar los zapatos. La vegetación es radiante y abundante, hay muchos árboles portadores de elegancia sus ramas rozan el cielo y son el hogar de muchos animalitos.
Después de unos cuántos metros de recorrido por el bosque que parece de duendes y hadas el camino abre paso a una extensa vegetación herbácea, allí volvemos a ver el sol , iluminando nuestros rostros de gran alegría porque ya estas en Cocollar, de exactamente a un costado del complejo de cabañas Pueblo Pequeño.
Regresamos nuevamente al Copey para disfrutar de unas hermosas panorámicas del pueblo, el sitio es una loma ubicada a un lateral de la escuela, allí disfrutamos de un clima bastante agradable e hicimos lindas fotografías. Un abrazo. Hasta la próxima.
Fotos de Sandra Giannantonio.